Palabras que resuenan en mi mente sin encontrar sus significados, pensamientos que duelen nada más tenerlos a pesar de que la realidad sea diferente y acciones de otras personas que hacen tanto daño como una estaca directa al pecho, una estaca de inocencia, egoísmo y "necesidad autoinflingida". Daño constante a nuestro propio subconsciente al llevarle la contraria... Ese es mi día a día.
Empezando por el principio y máscaras a parte, quién me conozca sabrá de sobras que soy una persona bromista y con cierta tendencia a la risa. Siendo claros y sinceros, es algo que simplemente me encanta. La risa es la cura de cualquier mal...
Pero reírse de algo cuando tus ojos quieren llorar, tu boca pide secarse y tu vida escapa por cada exhalación de aire, es cuanto menos incomodo.
No obstante hemos de ser conscientes y mirar atentamente, a nadie le gusta estar en este tipo de situación, pero todos hemos pasado por cosas así, y es que no hay nada más cierto que el hecho de que hasta que no hagas sufrir al prójimo y seas capaz de verte reflejado en sus ojos, nada cambiará.
Lee atentamente y dime si no estás en la misma situación, pongo mi mano en el fuego y aseguro que es así.
Hambre, pobreza, infidelidades, traiciones, discusiones varias, asesinatos, robos, atracos, peleas,... Son inventos creados para herir... ¿Seguro que no has pasado por uno de estos? ¿Acaso no los temes?
Y encima vivimos en un mundo que acepta todo esto como si fuese normal, porque en lugar de mirar con los ojos bien abiertos y la cara fija vemos mucho más cómodo considerarnos angelitos que no pueden evitar estos supuestos ya que iría en contra de su naturaleza, ignorar lo que sucede y mientras tanto pensar en lo buenos que parecemos mientras ignoramos en realidad lo malos que somos.
Al menos hoy dormiré a gusto pensando en esto y procuraré parecer un angelito mientras los problemas de las demás personas simplemente me dan igual, porque a fin de cuentas soy como todos: un cabrón.
Mientras tanto, tú amigo mio, sigue pensando que hasta que no hieras al prójimo no te darás cuenta de que te pueden hacer lo mismo a ti, y volverás a caer, porque amigo... No eres único.
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